David. 32 años. Angustia y tristeza

Responder a la pregunta de qué me ha aportado el hecho de hacer «terapia» (o lo que sea) contigo, es muy fácil definirlo de pensamiento y sentimiento, pero difícil para mí de poner en palabras.

Para ser sincero, al principio creía que pasaba más tiempo explicándote quien soy y que me sucedía, que aplicando un tratamiento o terapia para «curarme». Lo que ha pasado, sin embargo, es que ya hace unas sesiones atrás, me di cuenta que aquellas «inocentes» preguntas que me hacías, son las que me hacían cuestionar las cosas, reflexionar, y poco a poco, gracias a ello, ir cambiando mi conducta, o mejor dicho, mi manera de entender o percibir las cosas. No sabría decirte cómo ha sido exactamente, pero ha cambiado.

Hemos hecho que haya ganado en autoestima, en relativizar las cosas que no son importantes, en que sea capaz de reivindicarme cuando lo creo necesario, ya entender mejor cómo hacer funcionar mi relación de pareja «encontrando el equilibrio en la balanza» .

Es cierto que algo todavía queda, pero ahora soy capaz de afrontar mejor.

Este trabajo ha sido un punto de inflexión que ahora espero saber conducir, e ir progresando, aunque soy consciente de que la vida son altibajos, y será precisamente, en los momentos del «abajo» cuando veré hasta donde he llegado. Y si no lo consigo solo, siempre tendré un salvavidas llamado Anna.

Gracias por todo!