Nuestro último cartucho, así definíamos mi pareja y yo el estado en el cual estábamos antes de comenzar la terapia, después de 4 años de relación e infinidad de peleas, entendimos que tal y cómo seguíamos, no conseguiríamos llegar lejos y en cambio los sentimientos que sentíamos nos hacían seguir luchando, creando de las peleas y el amor, un día a día tóxico.
Nuestra pareja se creó a partir de mi divorcio, tengo dos hijos y antes de empezar una convivencia con Jordi, viví sola durante dos años, llevando una relación que me marcó mucho personalmente por faltarme ver más implicación por parte de mi pareja actual.
Anna evaluaó muy bien nuestro problema, fue clave para mí oírle decir que en nuestra relación no había habido unos buenos cimientos iniciales y que no había una base sólida, además de que yo siempre en cualquier pelea reprochaba la desatención del pasado. Tuve que empezar de nuevo, dejando de retroalimentarme del dolor que me causaron aquellos años, y empezar a valorar lo que sí ahora hacía por nosotros y ayudar a crearlo.
Los trabajos que tuvimos que hacer fueron fomentar un «nosotros”, tener proyectos juntos, hacer cosas por la relación unificándonos más, dejar de pensar en el pasado y mirar hacia el futuro.
Por otro lado, para suavizar el tono de nuestras peleas nos enseñó a conectar con el otro cónyuge, bajando el nivel de rabia y comunicándonos pensando en lo que siente la otra persona. Esto fue clave para dejar de alimentar el fuego propio, apaciguarlo y poder acercarnos más sin alargar las peleas días y días.A fecha de hoy, nuestra relación es normal, ambos pensamos en los dos, estamos creando bases y aunque parezca obvio lo que explico, para nosotros era inexistente y nos sustentábamos por los sentimientos, pero arrastrábamos rencor, no existía unificación y estábamos sumergidos en nerviosismo, mal rollo y reproches.Ahora estamos felices, y TRANQUILOS, nos peleamos como todos, pero ya no es igual, sabemos solucionarlo, no alcanza el nivel de odio de antes y nos sentimos más pareja que nunca.Estamos encantados, ha sido un trabajo que siempre agradeceremos, te debemos nuestro futuro porque ahora sí que somos una pareja con proyecto y nuestro último cartucho ha sido en positivo.
Gracias Anna, un fuerte abrazoNuria y Jordi